17 diciembre, 2011

el amor


Hay veces de las que te enamoras y sin darte cuenta te vuelves ciega, pasas los días pensando en él, en su sonrisa, en su mirada en lo grande que tiene el corazón... Tan sólo buscas un lugar dentro de su ser, y él simplemente te ve como una amiga más. Le repites miles de veces que le quieres y él no sabe ya cómo reaccionar.
Lo ves cada día, y no soportas la agonía de no poderle abrazar, sientes tan fuertemente el amor que ya te dá igual lo demás.
Se te presentan ante ti cientos de amores y ninguno quieres escoger, siempre por el camino difícil, pero seamos realistas hasta que no lo tengas no sabrás querer. Intentas querer a los demás pero te parece imposible, tu le amas el ama otra y otro te ama a ti. 
Desearías que en ese círculo tan sólo hubiera un el y un tú pero con el tiempo te vas dando cuenta de que cada vez es más imposible, y ante la imposibilidad le hechas mucho más de menos. Te desesperas y caes en un mundo donde solo puedes dar consejos, donde solo puedes hacer feliz. Un mundo amargo dónde no encuentras salida, la única que quieres es la que aparece él.

Es extraño, sufres, no quieres a nadie más.. Rechazas cualquier beso y cualquier caricia que no sea la suya, una caricia que quizás jamás llegues a sentir...
Me jode no saber aceptar que jamás te voy a tener.

No hay comentarios:

Publicar un comentario